Aventura Norte – Arriondas

Han sido unos días increíbles. Ya no se encuentran sitios así, donde la atención y el trato es tan personal. Te tratan como si fueras de la familia, o como ese amigo de toda la vida que acoges con los brazos abiertos. La comida es inmejorable, toda casera y en cantidad, desde el primer planto hasta el postre.
Las habitaciones son amplias y están muy limpias; los baños son igualmente amplios, al menos el de mi habitación.
Y por si eso fuera poco, el entorno es maravilloso. Junto al albergue está el rio, con su relajante sonido, completa el hermoso paisaje verde de las montañas que hay justo enfrente del alojamiento.
Respecto a las canoas y el material, todo genial. Lo que más me gustó es que las canoas tiene respaldo y asiento, lo cual terminas agradeciéndolo enormemente. Los chalecos y equipamientos limpios y en buen estado.
Yo lo dice la frase: Asturias, paraíso natural. Y yo… doy fe de ello.
Volveré. Eso seguro.

Experiencia para recordar. De 10. Una maravilla.
Eramos un grupo de 12 personas de una despedida de soltero y teníamos contratado la actividad de Rafting pero al no haber suficiente caudal en el río se habló con la empresa 2 días antes y se cambió a descenso de barrancos. Lo organizan muy bien. Tanto el personal de la empresa como los monitores son muy agradables y eso que eramos un grupo grande y llegamos tarde… pero no pusieron ni un «pero» ni una mala cara. Los monitores son geniales y crean una confianza en ti mismo brutal a la hora de descender los barrancos. Tienen un conocimiento y una seguridad grandísima. Siempre dándote consejos útiles. No puedes estar en mejores manos, de verdad.
Repetiremos la experiencia porque nos hemos quedado con muchas ganas del Rafting. UN 10!!!!

Hemos hecho la bajada del Sella por primera vez, y con esta empresa por lo que no puedo comparar con otras empresas.
De ella, cosas buenas son que las canoas llevan respaldo para la espalda y se agradece mucho, sobretodo tras unas horas, y el picnic, que no es el típico bocata de chorizo sino un trozo de empanada de atún y un bollo preñado.
No me ha gustado mucho: no tienen un parking suficientemente grande para la cantidad de gente que les llega, los vestuarios y baño bastante justitos de condiciones, y la explicación que te dan antes de entrar al río excasa y masificada, pretenden que pruebes a remar en el aire y estás rodeado de gente a pocos centímetros…
Bueno, y la experiencia de bajar el Sella en agosto no se la recomiendo a nadie. Seguro que fuera de verano con menos gente se disfruta mucho, pero con la cantidad de gente que lo hace en verano cada día, no se puede ni remar, parecen los autos de choque…